Balneario de Chiclana - Hotel Fuentemar Chiclana de la Frontera, Chiclana de la Frontera

Este hotel tiene un ambiente tranquilo y un buen servicio, además la comida es de calidad. Sin embargo, la experiencia general fue un poco estresante debido a la rudeza de otros huéspedes y las habitaciones no estaban a la altura del precio que pagamos. La cercanía al Balneario Fuenteamarga es un gran plus para quienes necesiten tratamientos de salud.

El hotel tiene un ambiente tranquilo y limpio, ideal para quienes buscan relajarse. La calidad de la comida es muy buena, pero la experiencia puede verse afectada por la actitud de algunos huéspedes. La proximidad al Balneario Fuenteamarga es un gran plus, especialmente para tratamientos de salud. Sin embargo, las habitaciones pueden mejorar en comodidad y vista.

Este hotel tiene una buena relación calidad-precio y se encuentra en un entorno tranquilo, ideal para relajarse. La calidad de la comida es destacable y el acceso al balneario cercano es un gran plus para tratamientos de salud. Sin embargo, la experiencia puede verse afectada por la falta de amabilidad de algunos huéspedes y el pequeño tamaño de las piscinas.

Mi experiencia en este hotel fue muy mixta. Por un lado, disfruté de la calidad de la comida y la tranquilidad del entorno, pero la actitud de algunos huéspedes fue muy incómoda. Las habitaciones que nos dieron al principio eran bastante decepcionantes, pero al final logramos un buen cambio. La cercanía a la playa y el balneario es realmente un punto a favor.

Este hotel tiene una buena calidad de comida y se encuentra junto a una playa hermosa, pero la experiencia general fue opacada por el trato poco amable de algunos huéspedes, en su mayoría alemanes. Los servicios del personal tampoco fueron del todo agradables, lo que generó una sensación de incomodidad durante nuestra estancia. A pesar de estos inconvenientes, el acceso a excursiones a Sevilla fue un buen punto a favor.